
Los guisantes estofados, es un plato muy típico de Cataluña, que se puede hacer con muchos ingredientes, como jamón, chorizo, huevos, etc. En la temporada de los guisantes frescos son una autentica «delicatessen», pero como tenemos todo el año congelados se pueden comer en cualquier época del año.
La receta que hoy comparto, es muy sencilla y nutritiva, sirve como un primer plato o como acompañamiento de unas salchichas, carne o pescado a la plancha, y es ideal para llevar en el tupper.
Ingredientes:
- 1 kg. de guisantes congelados
«Tupper listo para la mochila» - 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de harina
- 1 hoja de laurel
- 150 ml. de vino blanco
- Huevos duros
- Aceite de oliva
- Sal
- Perejil ( puede sera también, menta o albahaca)
- Jamón ibérico o de Teruel ( opcional)
Elaboración:
Rehogar la cebolla y ajos picados en aceite sin que se quemen, añadir el jamón picado, el laurel y la harina, dar unas vueltas, añadir el vino y dejar evaporar el alcohol removiendo.
Agregar los guisantes congelados y cubrir con agua, añadir la sal y cocer a fuego bajo durante 25 minutos, o hasta que los guisantes estén tiernos, añadiendo a media cocción el perejil picado ( o la menta o la albahaca).
Servir con huevo duro, o bien, cuajar los huevos en la cazuela, eso ya lo dejo a vuestro gusto, queda fenomenal de cualquiera de las maneras.
Espero os gusten, se hacen en un «plis plas» y aguantan en la nevera 4 – 5 días, además congelan muy bien.