
Los pescados admiten multitud de recetas aunque luego generalmente solemos caer en hacer siempre lo mismo, sota, caballo y rey.
La idea de utilizar la técnica de los tres vuelcos se puede hacer con casi cualquier pescado blanco fresco.
Yo lo he hecho con una corvina abierta para la espalda y ha quedado deliciosa y no puede ser más sencillo y rápido de preparar.
Ingredientes:
- 1 corvina de 2,5 kg.
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Para el sofrito:
- 1/2 vaso de aceite de oliva
- 6 dientes de ajo
- 1 guindilla/piparra laminada
- 1 chorro de vinagre o zumo de limón
Elaboración:
Precalentar el horno a 200 grados con calor arriba y abajo.
Salpimentar la corvina abierta para preparar a la espalda (lo hacen en la pescadería), colocar en una fuente de horno con una pizca de aceite, y con la piel del pescado hacia abajo.
Cuando lleve unos 20 minutos, sacar la bandeja del horno, tiene que estar el pescado casi hecho pero a falta de un punto.
Poner el aceite a calentar en un cazo y añadir los ajos y la guindilla laminados, freír a fuego medio hasta que se empiecen a dorar ligeramente.
Volcar el aceite sobre el pescado y con cuidado pasar de nuevo al cazo el aceite junto con los jugos que ha soltado la corvina.
Calentar durante unos instantes el aceite de nuevo y repetir la operación completa.
A la tercera vez que se vuelca el aceite y los jugos, añadir el vinagre o zumo de limón, volcar sobre el pescado y listo para comer. El resultado es espectacular y muy recomendable, queda riquísimo y con una ensalada tenemos un plato muy completo.