
Es un pincho ideal para un aperitivo original para cualquier domingo o fiesta de celebrar, con un contraste de sabores que le hace realmente delicioso.
Un aperitivo fácil y rápido de preparar, además de muy colorido, que os puedo asegurar que desaparece de la mesa en un minuto… No pongo cantidades exactas porque dependerá de la cantidad de pinchos que se hagan.
Ingredientes:
- Rebanadas de pan
- Morcilla de arroz
- Pimientos del piquillo
- Huevos de codorniz
- Aceite de oliva
- Sal
Elaboración:
Cortar la morcilla en rodajas gruesas y no quitar la piel para que no se deshaga al freír. Reservar.
Cortar el pan en rodajas como de un dedo de grosor y reservar.
Poner 2 cucharadas de aceite en una sartén y caramelizar los pimientos, es decir, poner los pimientos enteros y escurridos a fuego muy bajo, salar y a los 15 minutos dar la vuelta y volver a dejar otros 15 minutos, sacar y reservar.
Poner aceite en una sartén y freír la morcilla, colocar en un plato con papel absorbente y reservar.
Poner unas gotas de aceite en una sartén antiadherente y cuando esté caliente hacer los huevos de codorniz de uno en un, tienen que quedar tipo plancha con la yema blandita.
Tostar las rebanadas de pan y montar el picho, colocar una rodaja de morcilla y encima una tira de pimiento del piquillo y al lado el huevo de codorniz.
A disfrutar de un delicioso pincho de morcilla.