
La fresa es la fruta que más relaciono con la primavera. Ya sé que ahora hay fresas, o mejor dicho fresones, desde antes de Navidad, pero para mí sigue siendo la fruta por excelencia de la primavera. Es una fruta que me encanta. Durante la temporada en mi casa se comen un montón de fresones. Consumimos una buena cantidad al natural, simplemente a mordiscos.
La receta que hoy comparto son fresas con azúcar y vinagre, la presencia del vinagre puede resultar extraña, su sabor ácido no parece en principio lo más agradable en un postre, pero os aseguro que el sabor del vinagre no se nota en absoluto y su presencia contribuye a que las fresas estén más dulces y suelten todo su jugo.
Ingredientes:
- 500 gr. de fresas.
- 2 – 3 cucharadas soperas de azúcar.
- 1 cucharilla de vinagre
Elaboración:
Lavar las fresas sin dejarlas en remojo, quitar los rabitos y partirlas en trozos.
Según las vamos cortando las ponemos en un bol , a mí me gusta emplear un recipiente de cristal.
Echar el vinagre sobre las fresas, yo he utilizado vinagre de cava, pero se puede poner cualquier otro vinagre, espolvorear el azúcar que puede ser blanco o moreno y remover.
Tapar con papel film y dejar reposar las fresas en la nevera al menos un par de horas para que suelten todo su jugo. A mí me gusta prepararlas la noche anterior y dejarlas macerar toda la noche en la nevera.
Servir las fresas en cuencos y regarlas con el jugo que han soltado, y ya tenemos listas unas deliciosas y refrescantes fresas.