
Las espinacas no suelen ser una de las verduras más populares, pero preparada de esta forma a la crema, con besamel, están buenísimas. Si además les ponemos un poco de queso por encima y gratinamos unos minutos en el horno tendremos un plato riquísimo al que no podrán resistirse ni los menos amantes de las verduras.
Qué listas e ingeniosas son las madres cuando se trata de que los peques se acostumbren a comer verduras. Estoy segura de que más de uno empezó a disfrutar de las espinacas con esta receta.
Ingredientes:
- 500 gr. de espinacas frescas, se pueden utilizar congeladas.
- 60 ml. de aceite de oliva
- 50 gr. de harina
- 500 ml. de leche
- Sal
- Nuez moscada
- Queso rallado
Elaboración:
Limpiar, lavar y cocer las espinacas en agua con sal durante 10 minutos, escurrir y reservar.
En una cazuela poner aceite y la harina remover y cocer durante dos minutos, ir añadiendo la leche poco a poco, las sal y la nuez moscada y cocer a fuego medio durante 10 minutos sin dejar de remover.
Añadir las espinacas bien escurridas a la besamel, remover y cocer todo junto durante 5 minutos.
Colocar en una fuente apta para el horno, o bien en cazuelitas individuales, cubrir con queso rallado y meter en el horno para gratinar.
Listas unas deliciosas espinacas con besamel.