
El caldo gallego no tiene una receta única y es que se metía a la cazuela lo que había por casa. Lo común a todas las recetas son ciertos ingredientes que se usan en mayor o menor medida. Unos cachelos, un toque de unto, unas judías blancas, carne (ternera y cerdo), un buen trozo de chorizo gallego ahumado y verdura, normalmente, grelos, nabizas (brotes del nabo), berza o repollo blanco.
He hecho una cazuela grande, pues el caldo mejora de un día para otro. Cada día está mejor que el anterior. Así que si queréis tener uno de los mejores reconstituyentes made in Galicia para recuperaros de un largo día de trabajo esta es la receta.
Ingredientes:
- 200 gr de judías blancas
- 300 gr de ternera (jarrete)
- 4 patatas
- 300 gr de berza
- 20 gr. de unto
- 2 chorizos gallegos
- 2 morcillas
- Opcional: Carne salada de cerdo: costilla, panceta, codillo, hueso de espinazo
- 1 cucharada de aceite de oliva para rociar al final
Elaboración:
Poner las judías en remojo en agua fría durante unas 12 horas aproximadamente, así como todas las carnes saladas de cerdo.
Escurrir las judías que teníamos en remojo y poner en una cazuela cubiertas de agua fría, añadir el chorizo, la morcilla, el unto y las carnes, dejar cociendo a fuego medio durante una hora y media o dos horas, espumar de vez en cuando.
Cuando las carnes estén bien cocidas, retirar de la cazuela y reservar.
Mientras se cuecen las carnes, lavar y trocear la verdura, en este caso he empleado berza que está muy rica. Cocer en agua con sal durante 20 minutos, escurrir.
Añadir al caldo con las patatas cuando hayamos quitado las carnes y el unto, cocer durante otros 25-30 minutos más. Es hora de probar de sal y ver si necesita.
Picar en trozos pequeños la carne, el chorizo y la morcilla e introducir en la cazuela. Remover para juntar todo. Dar el toque final con un chorrito de aceite de oliva y ya está.
Tener en cuenta que el caldo es para tomar varios días y que a partir del segundo está perfecto pues se juntan mucho mejor los sabores, se suele decir que “se agarran”.
Cuando lo vayáis a tomar calentar hasta que esté bien humeante y disfrutar de este delicioso y contundente caldo gallego.