
Una de las recetas que no podía faltar en el blog es una compota de manzana, de esas caseras y de toda la vida, podéis emplear aquellas manzanas que más os gusten y no deja de ser una receta saludable, nutritiva, ligera y muy económica. La compota de manzana se puede conservar unos días en la nevera.
La compota de manzana puede servirse templada o fría que también resulta muy buena, sobre todo en verano. Es un acompañamiento perfecto para los helados, pero también para platos salados de carne como el pollo asado.
Ingredientes:
- 4 manzanas grandes
- 100 gr. de azúcar moreno
- La piel de una naranja
- 1 palo de canela
- 300 ml. de agua
Elaboración:
Poner en una cazuela el azúcar, la piel de naranja, el polo de canela y el agua, llevar a ebullición y cocer a fuego suave durante 15 minutos.
Mientras se hace el almíbar, pelar, descorazonar y cortar las manzanas en cuartos, meter en el almíbar y tapar la cazuela. Cocer a fuego bajo durante 25 – 30 minutos, apagar el fuego y dejar reposar 15 minutos.
A mi me gusta la compota que quede más bien entera la manzana, si os gusta más tipo puré solo hay que chafar la manzana con un tenedor.
Disfrutar de esta sana, sencilla y deliciosa compota de manzana casera.