
Me encantan las quiches, las hay prácticamente de cualquier cosa, y puede que ésta no sea la receta clásica de quiche lorraine pero es bastante rápida de hacer y queda genial.
Es ideal para poner en una cena de picoteo, se puede tener preparada con antelación y tomar templada, y es fantástica para llevar en el tupper. Gusta a todo el mundo pero sobre todo a los niños que se la comen a «dedo»…
Ingredientes:
- 1 lámina de masa quebrada
- 200 gr. de beicon en tacos
- 3 cebollas caramelizadas
- 200 ml. de nata para cocinar
- 3 huevos
- Aceite
- Sal
- Azúcar moreno
- Pimienta negra molida
Elaboración:
Colocar la masa en un molde redondo, se puede poner con el papel que viene, o bien, untar el molde con mantequilla.
Precalentar el horno a 200 grados con calor arriba y abajo.
Poner aceite en una sartén y caramelizar la cebolla cortada en juliana, añadir un pellizco de sal y otro de azúcar moreno, pochar hasta que tenga un color avellana. Escurrir y reservar.
En el mismo aceite de hacer la cebolla sofreír el beicon en tacos pequeños, escurrir y reservar.
Batir los huevos en un cuenco y poner sal y pimienta negra molida, agregar la nata para cocinar y añadir la cebolla caramelizada y el beicon, mezclar bien y poner en el molde con la masa quebrada.
Meter al horno precalentado a 200 grados durante 45- 50 minutos, hasta que este cuajada la quiche, dejar enfriar a temperatura ambiente y desmoldar.
Lista una deliciosa quiche de beicon y cebolla caramelizada, para chuparse los dedos…