
La combinación de la manzana con el hojaldre es espectacular y estas tartaletas de manzana son justo eso, hojaldre crujiente con unas deliciosas manzanas «reineta» que dan ese punto que no tienen otras manzanas.
Me gustan los postres que no sean complicados y a veces la repostería es complicada y muy técnica, y yo no tengo paciencia. En cambio, estas tartaletas se hacen rápido, se ven hermosas están muy sabrosas y crujientes, y solo llevan 3 ingredientes, que más se puede pedir…
Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre
- 3 – 4 manzanas reineta
- Mantequilla
Elaboración:
Precalentar el horno a 200 grados con calor arriba y abajo.
Extender la lámina de hojaldre en la bandeja del horno, dejando debajo el papel que viene envuelta, cortar la masa en 9 trozos, o 6 dependerá de lo grandes que se quieran las tartaletas.
Pinchar la masa con un tenedor, dejando un margen alrededor de cada tartaleta sin pinchar.
Pelar y descorazonar las manzanas, partir en láminas de medias lunas más bien finas, colocar encima de la masa bastante juntas, es decir, superpuestas unas encima de otras, cuando estén todas con la manzana poner unos trocitos de mantequilla por encima.
Meter al horno precalentado a 200 grados durante 30-35 minutos, hasta que estén doradas. Apagar y dejar 10 minutos en el horno con la puerta entre abierta.
Se pueden untar con mermelada de albaricoque o la que tengáis a mano, para darle un toque de brillo y listas unas sencillas y deliciosas tartaletas de manzana.
Un postre delicioso y nada empachoso…