
La llaman “la reina de la huerta” con toda la razón del mundo porque es la más delicada, exquisita, nutritiva y saludable. Sin embargo, es una reina bastante desconocida.
Lo que le pasa a la borraja es que es barata, pero tiene un sabor fino y delicioso. Para ofrecer toda su plenitud, además, no precisa de complicadas elaboraciones, en Aragón la hemos comido siempre, sencillamente, hervida con patatas y aliñada con un rico aceite de oliva en crudo. La de hoy es con un refrito de ajos y pimentón, para variar, y queda muy rica.
Ingredientes:
- 1 kg. Borraja fresca.
- 2- 3 patatas medianas
- 2 huevos duros (opcional)
- Aceite de oliva
- 2 dientes de ajo
- Sal
- 1 cucharada de vinagre
- 1 cucharada de pimentón
Elaboración:
La borraja se limpia de hojas verdes con un cuchillo, se retiran las hojas para dejar los tallos, pero no se limpian de esos pinchitos muy finos que efectivamente en crudo pueden parecer desagradables, pero que NUNCA molestan una vez cocida la verdura. Y además quitarlos les resta sabor y textura.
Poner agua con sal en una cazuela y cuando empiece a hervir añadir la borraja limpia y las patatas que una vez peladas debes chascarlas en vez de cortar así sueltan el almidón y quedan más suaves en la cocción y tardan menos en cocer. Cocer durante 20 minutos.
Escurrir las verduras en un colador y volver a poner en la cazuela.
En una sartén poner el aceite de oliva y rehogar a fuego medio los dientes de ajo laminados con cuidado de que no se quemen, incorporar el pimentón fuera del fuego y mezclar, agregar el vinagre y remover.
Añadir el refrito a la borraja hervida junto con las patatas y rehogar durante un par de minutos.
A disfrutar un montón con este sencillo pero rico plato de verduras tradicional. Servir acompañada con los huevos cocidos.