La receta que hoy comparto es una riquísima tortilla de patatas con calçots, aprovechando que mi hermana me ha traído unos deliciosos y tiernos calçots.

El Calçot es una cebolla blanca que se cultiva de una manera muy especial para que sea alargada, y que resulta ser uno de los platos típicos por excelencia de la gastronomía catalana.

Ingredientes:

• 4  patatas medianas
• 12  calçots pequeños
• 6 huevos
• Aceite de oliva
• Sal
• Pimienta
• Salsa romesco (opcional)

Elaboración:

Limpiar los calçots como si de una cebolla se tratase y cortarlos a rodajas.

Poner en una sartén un buen chorro de aceite de oliva. Sofreír hasta que tomen color y estén blanditos. Escurrir y reservar.

Pelar y cortar las patatas para tortilla. Poner aceite en una sartén, sazonar y freír a fuego medio, cuando estén blandas, escurrir y reservar.

Batir los huevos en un bol y salpimentar, añadir las patatas, y los calçots mezclar bien.

Poner en una sartén una cucharada de aceite y cuando esté bien caliente poner la mezcla para la tortilla, y cuajar, por un lado, a fuego medio y luego darle la vuelta con la ayuda de un plato, cocinar hasta que nos guste el punto de cuajado. En casa nos gusta poco hecha.

Lista una exquisita tortilla, ideal para la cena de cualquier día, si os gusta y tenéis en casa acompañar con salsa romesco, riquísima…

SONRÍE, después buscamos el motivo.